Cómo reaccionar cuando el coche hace un trompo

El sobreviraje es el causante de esta pérdida de control

El sobreviraje es el causante principal de que el conductor pierda el control de las ruedas traseras del coche, lo comúnmente conocido como “trompo”. Aprender a manejar esta situación es importante no solo para garantizar nuestra seguridad, sino para garantizar que otros conductores puedan circular de forma tranquila y segura. ¡Te lo enseñamos en vídeo con nuestros compañeros del RACC!

 

Saber cómo actuar cuando el coche hace un trompo es tan importante como saber evitarlo. Al volante siempre debes mantener la máxima precaución, alerta y seguridad para evitar que cualquier imprevisto en la carretera pueda aguar nuestro viaje. Una conducción 100% segura es nuestro principal objetivo en Toyota, por ello hemos creado la tecnología de seguridad más puntera para nuestros coches.

En ocasiones, se dan situaciones que escapan de nuestro control. Una de las principales causas de accidente de tráfico es la pérdida de control del vehículo por diferentes factores que condicionarán nuestra seguridad y la del resto de conductores en las vías públicas.

Por ello, siempre es importante conocer nuestro coche, tener presente cuáles son los principales peligros que podemos encontrarnos en la carretera y tratar de anticiparnos a todos ellos.

¿Qué es el sobreviraje?

El sobreviraje es una situación de conducción que provoca el deslizamiento por la pérdida de control del eje trasero. Normalmente, se da con mayor frecuencia en los coches de tracción trasera, pero vehículos de tracción delantera o 4x4 no están exentos de perder el control del eje posterior.

  • La pérdida de adherencia en las ruedas traseras tiene como consecuencia ‘hacer un trompo’. Un trompo ocurre cuando, tras la pérdida del control del tren trasero, las ruedas posteriores provocan el giro sobre un mismo eje del coche, provocando que acabes dando un giro de 180 grados en la carretera. 

    Esta situación conlleva poner en riesgo tu seguridad y la de otros conductores, ya que puede terminar con la salida de la carretera, el choque contra el guardarraíl, la invasión del carril contrario o incluso sufrir un accidente de tráfico con otro vehículo.
¿Por qué sucede el sobreviraje?

El sobreviraje tiene lugar por una serie de factores bajo nuestro control, que en muchos casos se escapan de nuestro dominio y provocan la pérdida de adherencia y el famoso trompo. Estas son las principales causas de la aparición del sobreviraje:

  • Exceso de velocidad: la velocidad es la principal causante de la aparición del sobreviraje, especialmente en vehículos de tracción trasera. Al afrontar una curva pronunciada con una velocidad claramente superior a la recomendada por las señales, se provoca la pérdida de tracción.
  • Carretera: las inclemencias meteorológicas más comunes (lluvia, nieve, placas de hielo, barro, hojas…) condicionan la adherencia de las ruedas sobre el asfalto. La baja temperatura, especialmente en invierno, aumenta la probabilidad.
  • Mal estado de los neumáticos: los neumáticos son el único elemento en permanente contacto con el asfalto. Un mal estado de los mismos (excesivo desgaste, cristalización o presión de inflado incorrecta) minimiza el correcto rendimiento de los neumáticos y puede provocar que el coche no se agarre lo suficiente a la carretera.
  • Desperfectos en el vehículo: averías en la suspensión son también una causa probable del sobreviraje. El alineado y equilibrado de las ruedas, e incluso un reparto de pesos desfavorable y una frenada desigual en un mismo eje, pueden provocar que el sobreviraje entre en escena. Además, otros factores externos, como un golpe en la parte trasera del vehículo, pueden ocasionar el sobreviraje.
 
¿Cómo evitar el sobreviraje?

Tener una buena técnica de conducción e intentar mantener la calma es uno de los factores clave para combatir el sobreviraje. En los vehículos tanto de tracción trasera, delantera o tracción total es importante primero levantar el pie del acelerador y segundo centrarnos únicamente en el volante. Para poder superar el sobreviraje tendrás que realizar lo conocido como un “contravolante”, es decir, girar el volante en sentido contrario al de la curva.

Básicamente si la parte trasera del vehículo se desplaza a la derecha tendrás que girar a la derecha y si se desplaza hacia la izquierda deberás girar a la izquierda.

Una tendencia, que además es muy contraproducente cuando se pierde el control de las ruedas traseras y se va a realizar un trompo, es pisar el freno de golpe y luego girar el volante. De esta manera lo único que hacemos es aumentar el efecto sobrevirado y perder aún más el control del vehículo.

¡Pero cuidado! Si ya hemos perdido el control del vehículo y no podemos hacer nada, lo más recomendable es frenar a tope para mitigar la fuerza del golpe y que los daños sean los mínimos posibles.

Los sistemas de seguridad de Toyota, como el control de tracción, el ABS o el sistema Safety Sense intentan que el sobreviraje no tenga lugar bajo ninguna circunstancia, pero hay casos extremos en los que es muy complejo de evitar.

Sin embargo, recuerda anticiparte en todo momento a las condiciones cambiantes de la carretera, así como realizar un buen mantenimiento del coche y los neumáticos para minimizar la posibilidad de aparición del sobreviraje.

Descubre cómo de seguros son los Toyota Hybrid solicitando una prueba de conducción.