Los servicios incluidos en el renting de Toyota son:
- Mantenimiento y revisiones periódicas: mantenimiento integral, reparaciones mecánicas y revisiones técnicas obligatorias en la red oficial Toyota con componentes originales.
- Sustitución de neumáticos de primeras marcas y reparación de pinchazos.
- Asistencia en carretera veinticuatro horas con servicio de grúa del Centro de Asistencia de Toyota.
- Seguro a todo riesgo sin franquicia ni limitación de conductor.
- Gestión administrativa: pago de impuestos, gestión del proceso de matriculación, transporte y entrega del vehículo, etc.
- Gestión de Multas con servicio de atención telefónica y una app móvil.
- Vehículo de sustitución por avería o accidente.
Además, sobre todo en el caso de las empresas, los gastos del renting son parcialmente deducibles, por lo que será todavía más rentable.
Por otro lado, con el renting de Toyota, podrás ajustar la duración y los pagos mensuales en función de tus necesidades, decidiendo si pagar entrada o no, sin sorpresas y hacer una previsión más precisa de los gastos. Si te excedes de los kilómetros contratados podrás pagarlos adicionalmente y también podrás negociar ampliar el contrato si no has llegado el máximo permitido por la compañía financiera. En el caso de Toyota este límite es de 6 años.
Conducir siempre coche nuevo
Si eres de los que les encanta estrenar coche y te gusta conducir los modelos más actuales, el renting puede ser la opción perfecta, ya que al finalizar el contrato puedes renovarlo actualizando el coche a la última versión disponible que tengan en concesionario o incluso, cambiar a otro modelo más reciente. Según el tipo de conductor, esto también puede convertir el renting en una manera de financiación más rentable que la compra, ya que, si cada cierto tiempo cambiamos de vehículo y lo queremos nuevo, el precio de nuestro vehículo antiguo se haya devaluado en el mercado. De nuevo, todo depende del tipo de financiación que utilicemos y de sus condiciones.
Lo mejor del coche en propiedad
Tener un coche en propiedad es en sí una ventaja para mucha gente. Por un lado, puedes hacer siempre lo que quieras con el coche con total libertad; añadir los extras que quieras, cambiar elementos del interior y modificar el exterior sin restricciones o elegir el color y el acabado que más te guste. Hay que recordar que, cuando contratamos un coche a través de renting, los acabados y la gama de colores dependen de la oferta de renting. No siempre están todos los modelos en todos los acabados disponibles en este tipo de financiación.
Algo que a veces pesa a la hora de decidirse por la compra es el kilometraje. En realidad, con el renting de Toyota esto no supone un gran problema, ya que no se pagan extras si no se superan los 2.000 km por encima del kilometraje acordado. Sin embargo, para una persona que no puede calcular de manera un poco precisa los kilómetros que hace al año, la compra puede salir más rentable que el renting.
El coche es tuyo y lo podrás modificar y vender en el futuro
Para algunas personas es importante tener la opción de modificar el vehículo para personalizarlo y adaptarlo a las necesidades de cada momento. Esto no quiere decir que con un contrato de renting, no se puedan hacer pequeños cambios. Aunque el renting para particulares de Toyota ofrece vehículos con una gran cantidad de extras y, además, te permite hacer ciertos cambios bajo petición, si se quiere modificar algo como tintar las lunas o cambiar el sistema de sonido, puede que sea necesario consultarlo primero.
En términos económicos, la compra nos permite elegir seguro y servicios de mantenimiento entre diferentes compañías, con lo que es posible que encontremos opciones más económicas, si en nuestro caso particular no somos tan exigentes con la cobertura o no optamos por talleres oficiales de la marca.
Por último, otro de los aspectos que puede hacer más rentable un vehículo en propiedad frente a la fórmula del renting o el alquiler es que, en el momento en que quieras cambiar de coche o deshacerte del que tienes, podrás venderlo en el mercado de segunda mano, con lo que, en cierta medida, rentabilizarás la compra que hiciste en el pasado.
En definitiva, es cierto que el renting puede quitarte muchos quebraderos de cabeza a la hora de mantener tu coche, pero a todos los efectos, el coche no será tuyo si no ejecutas la opción de compra al finalizar el contrato.
Pero entonces ¿qué es más rentable?
Como has visto, es difícil valorar si es más rentable el renting o la compra porque todo depende del tipo de conductor, sus hábitos, sus necesidades y sus preferencias. Si das mucha importancia a la personalización del coche y haces muchos kilómetros anuales, a lo mejor te conviene tener un coche en propiedad. Si por el contrario, te gusta estrenar coche cada cierto tiempo y quieres desentenderte de las gestiones y gastos asociados al mantenimiento, es posible que el renting sea una solución perfecta para ti.
Toyota cuenta con un amplio abanico de opciones de financiación para que siempre encuentres la fórmula perfecta para ti. Además del renting, Toyota Easy por ejemplo, te permitirá elegir entre quedarte el coche, devolverlo o extender el contrato. Si además quieres olvidarte del mantenimiento, la garantía y la asistencia en carretera, ponemos a tu disposición Toyota Easy Plus. Si te inclinas por la financiación tradicional de Toyota Credit te permitirá adquirir tu vehículo en cómodos plazos. Con todas estas alternativas, no hay excusas para no acercarte a tu concesionario más cercano y probar los últimos modelos de Toyota.